Lugares insolitos del mundo

La puerta celestial
Cogemos hoy la mochila y las zapatillas de caminar y nos damos un paseo hasta la provincia de Hunan, en China. Para visitar un paraje natural bastante majo conocido como “la puerta del cielo”, un monumental agujero creado por la naturaleza en unas cumbres escarpadas quien sabe cuando.
Cogemos hoy la mochila y las zapatillas de caminar y nos damos un paseo hasta la provincia de Hunan, en China. Para visitar un paraje natural bastante majo conocido como “la puerta del cielo”, un monumental agujero creado por la naturaleza en unas cumbres escarpadas quien sabe cuando.

Una historia trágica en las faldas del Himalaya
Finales del siglo IX, en las cordilleras del Himalaya, un grupo de casi seiscientas personas camina a más de 5000 metros de altura por un paraje helado y alejado de las rutas conocidas. Bajo la ladera se divisa un pequeño lago glaciar. Las condiciones son duras, el frío es extremo y avanzar por la nieve cuesta cada vez más, nadie en el grupo sospecha que en breves instantes una tremenda granizada acabará con todos ellos y que el pequeño lago que se encuentra a sus pies se conocerá años después como “el lago de los esqueletos”, siendo sus propios huesos los que darán nombre a este lejano lugar.
Finales del siglo IX, en las cordilleras del Himalaya, un grupo de casi seiscientas personas camina a más de 5000 metros de altura por un paraje helado y alejado de las rutas conocidas. Bajo la ladera se divisa un pequeño lago glaciar. Las condiciones son duras, el frío es extremo y avanzar por la nieve cuesta cada vez más, nadie en el grupo sospecha que en breves instantes una tremenda granizada acabará con todos ellos y que el pequeño lago que se encuentra a sus pies se conocerá años después como “el lago de los esqueletos”, siendo sus propios huesos los que darán nombre a este lejano lugar.

La ciudad efímera
Yo no os voy a mentir, a mi el único hielo que me gusta es el de mis Gin Tonics, aunque admito que en esta ocasión no me importaría pasar un poco de frío para poder ver este lugar en persona. Construir una ciudad de hielo es un trabajo de chinos, literalmente.
Yo no os voy a mentir, a mi el único hielo que me gusta es el de mis Gin Tonics, aunque admito que en esta ocasión no me importaría pasar un poco de frío para poder ver este lugar en persona. Construir una ciudad de hielo es un trabajo de chinos, literalmente.

Bosques de caliza perenne
Nos damos hoy un paseo por otro de esos lugares que quitan el hipo. Imponente y enigmático, visitamos el Bosque de piedra de Madagascar o Tsingy, como lo llaman los lugareños y que en castellano antiguo viene a ser más o menos “el lugar donde no se puede caminar descalzo”.
Nos damos hoy un paseo por otro de esos lugares que quitan el hipo. Imponente y enigmático, visitamos el Bosque de piedra de Madagascar o Tsingy, como lo llaman los lugareños y que en castellano antiguo viene a ser más o menos “el lugar donde no se puede caminar descalzo”.

La ciudad de los Dioses y las Diosas
Nek Chand nació en 1924, en una localidad situada a 90 kilómetros al sur de Lahore que entonces era territorio indio y que tras la partición de 1947 pasó a formar parte de Pakistán; fue uno de los diez millones de desplazados indios que abandonaron la zona. Tras mucho deambular, él y su mujer llegaron a Chandigarh, la nueva y moderna capital de la región de Pendjab, diseñada nada menos que por Le Corbusier. Allí consiguió un empleo de modesto funcionario, inspector de carreteras, gracias al cual aprendió algunas técnicas que después le iban a resultar muy útiles.
Nek Chand nació en 1924, en una localidad situada a 90 kilómetros al sur de Lahore que entonces era territorio indio y que tras la partición de 1947 pasó a formar parte de Pakistán; fue uno de los diez millones de desplazados indios que abandonaron la zona. Tras mucho deambular, él y su mujer llegaron a Chandigarh, la nueva y moderna capital de la región de Pendjab, diseñada nada menos que por Le Corbusier. Allí consiguió un empleo de modesto funcionario, inspector de carreteras, gracias al cual aprendió algunas técnicas que después le iban a resultar muy útiles.

La historia de los Rhinogrades
Cuenta la historia que un tal Einar Pettersson-Skämtkvist, se echó a la mar huyendo de su cautiverio a manos del ejército japonés. Corría el año 1941 cuando el azar y las corrientes marinas llevaron a Einar hasta un archipiélago desconocido en algún lugar del Océano Pacífico. Allí descubriría un mundo totalmente nuevo en el que la evolución de las especies habría seguido unos caminos totalmente distintos al resto del planeta.
Cuenta la historia que un tal Einar Pettersson-Skämtkvist, se echó a la mar huyendo de su cautiverio a manos del ejército japonés. Corría el año 1941 cuando el azar y las corrientes marinas llevaron a Einar hasta un archipiélago desconocido en algún lugar del Océano Pacífico. Allí descubriría un mundo totalmente nuevo en el que la evolución de las especies habría seguido unos caminos totalmente distintos al resto del planeta.

Forestiere Underground Garden
Baldasare Forestiere era un inmigrante de origen siciliano que llegó a Estados Unidos en 1901, a los veintidós años. Durante casi cuarenta años, desde 1906 hasta su muerte, trabajó en la construcción de un extraordinario jardín cubierto.
Baldasare Forestiere era un inmigrante de origen siciliano que llegó a Estados Unidos en 1901, a los veintidós años. Durante casi cuarenta años, desde 1906 hasta su muerte, trabajó en la construcción de un extraordinario jardín cubierto.

Cuando los emperadores se cansaron de ser nómadas. Hablar de castillos no es nada espectacular, ya que hay miles de ciudades que cuentan con uno, en mejor o peor estado, pero si hablamos de África, la cosa cambia, y que allí haya no uno, sino una ciudad llena de castillos, si que sorprende. La ciudad se llama Gondar, y se encuentra en Etiopía.]

Un baño en el río azul
¿Podemos encontrar un río azul sin viajar a Pandora o al país de los pitufos? Por supuesto que sí, porque la paleta de colores de la naturaleza no entiende de incompatibilidades y en su grandeza, todo es posible.
¿Podemos encontrar un río azul sin viajar a Pandora o al país de los pitufos? Por supuesto que sí, porque la paleta de colores de la naturaleza no entiende de incompatibilidades y en su grandeza, todo es posible.

Tras la frontera de la civilización
Quiero iniciar con este hilo un recorrido por algunos de esos lugares de la tierra que yacen olvidados detrás de las fronteras de la civilización, demasiado alejados e inhóspitos para girar a la par del resto del mundo, allí donde lo cotidiano es lo extremo o la presencia humana es extraordinaria. A pesar de su aislamiento, o tal vez debido a ello, todos estos lugares han despertado en el hombre la curiosidad y la fascinación, el deseo de saber de ellos y de plantar su huella. En definitiva, todos aquellos sitios a los que uno no puede viajar simplemente dirigiéndose a su agencia de viajes más próxima y comprando un billete.
Quiero iniciar con este hilo un recorrido por algunos de esos lugares de la tierra que yacen olvidados detrás de las fronteras de la civilización, demasiado alejados e inhóspitos para girar a la par del resto del mundo, allí donde lo cotidiano es lo extremo o la presencia humana es extraordinaria. A pesar de su aislamiento, o tal vez debido a ello, todos estos lugares han despertado en el hombre la curiosidad y la fascinación, el deseo de saber de ellos y de plantar su huella. En definitiva, todos aquellos sitios a los que uno no puede viajar simplemente dirigiéndose a su agencia de viajes más próxima y comprando un billete.
ggg
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